Sales de tu casa, listo para arrancar un nuevo día, solo para descubrir que los ladrones han
hecho de las suyas y se han llevado hasta las llantas de tu vehículo. Es una situación
desesperante y frustrante, ¿verdad? ¡Pero no te preocupes! Aquí te contamos qué hacer si te
enfrentas a este desagradable escenario y cómo tu seguro vehicular puede sacarte del aprieto.

Lo primero es realizar la denuncia ante las autoridades policiales para que tomen registro de lo
sucedido. Luego, ¡contacta a tu compañía de seguros de inmediato! Si tienes la suerte de
contar con un seguro vehicular, es probable que estés cubierto contra este tipo de incidentes.
A continuación, te contamos qué tipos de seguros existen en el mercado:

Seguro Todo Riesgo: este tipo de póliza no solo te protege en caso de accidentes, sino también
en situaciones de robo de autopartes. Si tu auto ha sido despojado de sus llantas, parachoques
o cualquier otra parte, tu seguro puede cubrir los gastos de reparación o reposición.

Pérdida Total: en el desafortunado caso de que no puedas recuperar tu auto, ya sea por robo
o por daños irreparables, la cobertura de pérdida total de tu seguro puede entrar en juego. La
aseguradora te compensará con el valor comercial o convenido de tu vehículo, permitiéndote
reemplazarlo por uno similar.

Es importante revisar los detalles de tu póliza para entender qué cubre exactamente. ¡Tu
seguro vehicular está aquí para ayudarte en momentos como este!
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