Fiorella, 35 años, Piura
¡Hola, Fiorella! Este tema me trae muchos recuerdos. Hace unos años, cuando mi hermano falleció, dejó un préstamo pendiente con el banco. En ese momento, todos estábamos destrozados y pensábamos que además tendríamos que asumir la deuda. Pero gracias al seguro de desgravamen, el banco se hizo cargo del saldo, y nosotros no tuvimos que preocuparnos por nada. En aquel entonces, este seguro venía incluido automáticamente con cualquier crédito: personal, vehicular o hipotecario. Uno ni se daba cuenta de que lo tenía, pero cuando lo necesitabas… te salvaba.
Ahora las cosas han cambiado, y es importante que sepas cómo.
¿Qué es el seguro de desgravamen?
Es un seguro que se activa cuando el titular de un préstamo fallece o queda con invalidez total y permanente. En esos casos, la aseguradora asume el pago de la deuda con el banco, y la familia no tiene que responder por ella. Es decir, evita que tus seres queridos hereden tus deudas.
¿Qué ha cambiado desde septiembre?
Antes, el seguro de desgravamen era obligatorio para casi todos los créditos: tarjetas, préstamos personales, vehiculares e hipotecarios. Pero desde septiembre del 2025, la norma cambió.
Ahora, solo los créditos hipotecarios (los de mayor monto y plazo largo) seguirán exigiendo el seguro de manera obligatoria. En cambio, para los créditos de consumo, personales o vehiculares, el seguro será opcional. Esto significa que, al pedir un préstamo, el banco deberá ofrecerte dos opciones: una cuota con seguro y otra sin seguro. Tú decidirás cuál elegir.
¿Y qué pasa si no lo contratas?
Aquí viene lo importante, Fiorella. Si decides no contratar el seguro y algo grave te ocurre —como fallecimiento o invalidez total y permanente—, la deuda no desaparece.
El banco cobrará lo que se debe utilizando los bienes que dejes en herencia (casa, auto, terrenos, cuentas de ahorro, etc.). Esto se conoce como la masa hereditaria. Es decir:
- Si tus bienes alcanzan para cubrir la deuda, el banco los tomará como pago.
- Si no dejas bienes, la pérdida la asume el banco. Tus familiares no tendrán que pagar con su propio dinero, pero podrían perder parte de lo que les habías dejado.
Al final, la decisión es tuya, Fiorella. Pero ten en cuenta que el seguro de desgravamen cuesta poco y da mucha tranquilidad. En la mayoría de los casos ni se nota en la cuota mensual, pero si pasa lo inesperado, puede marcar la diferencia entre dejar paz o dejar problemas.