Llega el verano y con ello la tentación de lucir un bronceado color canela. Pero aquí viene la parte menos glamorosa de esta estación: el Perú tiene una de las radiaciones UV más altas del mundo. En temporada de calor, el índice UV puede llegar a niveles extremos, entre 11 y 20 según SENAMHI. Y cuando la radiación se dispara así, el precio por ese bronceado puede ser muy alto: quemaduras, envejecimiento acelerado, y lo más grave, cáncer de piel, uno de los más frecuentes en el país.
¿Cómo proteger tu piel sin dejar de disfrutar el verano?
Disfrutar del sol no está prohibido, pero hacerlo sin cuidado es como freírte a fuego lento. Aquí va lo esencial para sobrevivir a la temporada sin convertirte en camarón:
- El bloqueador no es opcional. Si vas a exponerte al sol, necesitas un protector con SPF 50 o más. ¿La clave? Aplicarlo 20 minutos antes de salir, reaplicarlo cada dos horas y no olvidar zonas olvidadas como orejas, cuello, nuca y el dorso de las manos.
- Ojo con las horas peligrosas. Entre las 10 a. m. y 4 p. m., los rayos UV están en su punto más alto. Si puedes evitar el sol en ese rango, hazlo. Y si no, busca sombra, usa sombreros de ala ancha y ropa ligera de manga larga.
- Los niños necesitan doble protección. La piel de los más pequeños es más sensible y vulnerable al daño solar. Usa bloqueadores especiales para niños, reaplica con más frecuencia y evita que jueguen bajo el sol directo en las horas de mayor radiación.
- Vigila tu piel. Lunares que cambian, manchas nuevas, heridas que no sanan… no las ignores. Haz chequeos dermatológicos una vez al año, incluso si no ves nada raro. La detección temprana es clave para evitar problemas mayores.
Y si aparece algo sospechoso…
Por más disciplinado que seas con el protector solar, el riesgo nunca es cero. Si alguna lesión luce sospechosa o si el dermatólogo recomienda una biopsia, tener un seguro oncológico te da un respaldo enorme:
- Cubre consultas y chequeos preventivos.
- Permite realizar diagnósticos como biopsias, dermatoscopias o exámenes especializados.
- Ante un diagnóstico, puede cubrir tratamientos completos.
Proteger tu piel no es exagerar: es cuidarte hoy para evitar problemas mañana. Porque no hay bronceado que valga más que tu salud.
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